Nació en Facinas el 25 de abril de 1939. Hijo de Antonio Cabeza y Antonia Gómez.

Era el menor de tres hermanos con Antonio y María.                 

Con pocos años quedó huérfano de padre y madre, pasando a vivir bajo la tutela del abuelo Gómez. Eran tiempos de muchas penalidades y poca preocupación por la enseñanza, por lo que no acudió a escuela alguna.


         Con edad de trabajar ayudaba a las familias de los dos abuelos en sus labores, uno tenía una posada y el otro un campo para cultivar y ganado que cuidar.

        Desarrolló una fuerza fuera de lo común proveniente de unos nervios de acero, de ahí que con la mayoría de edad se dedicó a las labores forestales, especialmente al trabajo del descorche como arriero, a cargar camiones de leña y otros trabajos que necesitaran de la fuerza bruta.

         Todo el pueblo lo conocía como un trabajador de fuerza extraordinaria.

         Pero la falta de una preparación y cultura lo llevó a permanecer soltero, y en su soledad con el duro trabajo y la despreocupación por alimentarse fue quemando su vida.

         No dejó de ser una persona introvertida, y muy cariñosa, que necesitó ingresar en una residencia geriátrica en Algeciras donde pasó los últimos años de su vida hasta su fallecimiento en el año 2012.

         Fue una criatura inocente víctima de una época y especialmente de la soledad y pérdida de los padres siendo tan niño.  

         Era mi primo, al que apreciaba mucho por haber sido tan desafortunado en la vida.

                                      Sebastián Álvarez Cabeza.